ENEMIGO SILENCIOSO
Amy Winehouse, fue una
cantautora británica que, a pesar de ser muy joven, se convirtió en un icono
musical. Su voz era excepcional y sus canciones con letras que retrataban su
vida identificaban con sus fans de manera inmediata. Componer era un proceso
terapéutico. Su sueño era transmitir con sus letras mensajes que ayudaran a su audiencia
y para ella, una catarsis ante su atribulada vida. No era amiga de las grandes audiencias
y la fama le caía mal y manifestaba que era una esclavitud. Saturada de su vida
de medios y ante la imposibilidad de manejarlo adecuadamente, se refugió en el
alcohol y la bebida, combinación que la llevó a un final prematuro. A los 27
años su corazón se paralizó y con ello comenzó su leyenda.
Naomi Osaka es una
joven japonesa campeona de tenis a nivel mundial. Ha conquistado cuatro Grand Slams
y es uno de los iconos actuales del deporte internacional. Es una de las atletas más comercializables e
influyentes del mundo gracias a sus resultados, su origen multiétnico y su
personalidad franca. En 2020 Forbes la nombró la atleta femenina con mayores
ingresos anuales de todos los tiempos. Time la incluyó en su lista anual de las
cien personas más influyentes del mundo en 2019 y 2020. En el tornero de Roland
Garros de este año, Naomi advirtió a los organizadores que no pretendía participar
en ninguna entrevista luego de los partidos por su salud mental. Al hacerlo fue
multada y esto ocasionó que ella renunciara el torneo, generando con esto una
serie de reacciones en los medios y los fanáticos.
Simone Biles, es una
joven gimnasta norteamericana, ganadora a sus 24 años de 30 medallas mundiales
y olímpicas, entre ellas cinco de Río 2016, cuatro de ellas de oro. Aspiraba en
estos Juegos Olímpicos de Tokio 2020 a ganar otras seis medallas, al
clasificarse para seis finales de gimnasia artística, todo un récord histórico.
Sin embargo, y ante el atónito rostro del mundo deportivo, esta atleta renunció
a su participación, en primera instancia, bajo el argumento de una lesión
muscular, y luego ante la dolorosa realidad de proteger su salud mental y
bienestar.
En alguna de sus medidas
estas tres jóvenes sufrieron de una terrible ansiedad.
La ansiedad es un
conjunto de procesos psicológicos y fisiológicos que aparecen cuando se
perciben peligros reales o percibidos, y que nos predispone a reaccionar
rápidamente a la menor señal de que hay que hacerlo. Hace que el sistema
nervioso permanezca en un estado de alta activación, de manera que se vuelve
más sensible a los estímulos imprevistos. Se trata de una respuesta adaptativa
del ser humano, siempre que esta sea proporcionada al estímulo que la
desencadena. Es una señal de alarma que, si se prolonga en el tiempo sin motivo
aparente, nos está avisando de que tenemos algo que revisar en nuestra vida. (Psicología
y mente)
Todos sufrimos de
ansiedad en una mayor o menor escala. No depende de razas o condición social o
buenas y malas situaciones. Es un proceso individual y personal de nuestra manera
de cómo afrontamos las situaciones de vida que nos tocan vivir. Para algunos la
ansiedad es un combustible que los alimenta a la respuesta, para otros, el paralizante
muy peligroso que puede derivar en conductas autodestructivas.
Todos tenemos nuestras
dosis de ansiedad y por ello, es importante aprender a reconocerlas y
manejarlas de la manera mas adecuada para cada quien. Lo importante es identificar
que la sentimos, evaluar sus niveles y precisar si la forma de abordarla nos es
adecuada y efectiva. De ser así, no tenemos mayores problemas y vamos por buen
camino. Si, por el contrario, sientes que la ansiedad te desborda, que por más
que intentes no consigues calmar esa angustia que te ahoga, es momento de
consultar algún profesional que te pueda ayudar a canalizar esas situaciones y evitar
males mayores.
Mientras tanto,
identifica siempre las situaciones que te agobian, evalúa que cosas puedes
hacer diferente para no afectarte, busca herramientas alternas para mantenerte
relajado: respira, medita, haz ejercicios al aire libre y mantén tu mente
ocupada en disfrutar las bondades de la vida y no perturbada por los abatimientos
de la misma.
El enemigo está allí
permanentemente, tenemos que identificarlo y combatirlo con nuestras mejores
armas: nuestro ser.
Recuerda que, la
felicidad no es una medida.
Saludos
Arnaldo
García Pérez
@arnaldogarciap
www.arnaldogarciap.blogspot.com
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